Sesión de tarde con olitas de 2 a 4 pies S swell y suave viento onshore

Segundo día del swell sureño que ha entrado estos días. Las condiciones estaban mucho mejor que el día anterior y el sol brillaba. El oleaje había subido considerablemente así que había que aprovechar la ocasión ya que las previsiones indicaban que al día siguiente el swell iba en descenso.


Llegamos al spot a las 5 de la tarde ya que las previsiones apuntaban a que a partir de las 6 el oleaje comenzaría a subir pero ya a la hora que llegamos estaba bastante bien aunque como es habitual con mucha gente en el agua. El inconveniente de este spot es que la playa es muy pequeña y el lineup muy compacto lo cual implica que estés completamente rodeado de surfers ansiosos de olas.


Tengo que reconocer que los locales del spot se comportan bastante bien a pesar de la invasión que sufren cuando hay este tipo de swells ya que al escasear los spots que pueden recibir swells de esa dirección son bastante escasos por la zona por eso cuando hay oleaje el spot se peta por completo.


Es cierto que las olas no son como en el norte pero para nosotros, los que vivimos aquí, son una bendición aunque sea para desahogar la tensión de tanta espera y decepción viendo como las previsiones se desvanecen en un par de días. Es ya habitual ver las previsiones y emocionarte porque ves que pata tal fecha entra un swell paro cuando al día siguiente vuelves a mirar las previsiones, el sell se ha desvanecido o ha cambiado de dirección.


Todos sabemos que el mediterráneo es un mar muy caprichoso y que durante todo el año los días de olas buenas son muy escasos por esa razón cuando tenemos olitas no nos lo pensamos y nos vamos directos al agua a pillar lo que sea, nos da igual, porque nunca sabemos cuando vamos a volver a tener olas, pienso que cualquier surfista, si tuviera que vivir aquí haría lo mismo, ¿o quizá no?.