El barco de la organización también tuvo que remontar las olas

En la cresta de la ola

Los participantes en el concurso de surf de Punta Galea y el barco de la organización bregaron con 77 ondas de hasta 5 metros.

Fuente: El Correo Digital , Pedro Izan/Bilbao

El acantilado de La Galea, en la localidad vizcaína de Getxo, se convirtió ayer en un balcón privilegiado para seguir el Campeonato de Ola Grande, una exhibición que atrajo a centenares de aficionados y curiosos. El surfista local Jaime Fernández se llevó el premio más importante, el destinado a quien cogiera la Ola Más Grande, de la denominada Oxbow Punta Galea Big Challenge.

Las previsiones eran buenas y, por fin, llegaron las olas, que deben tener un mínimo de cuatro metros (12 pies). La prueba contaba con un periodo de espera que comenzó el pasado 3 de diciembre y finalizaba el próximo jueves, día 15. Y es que las de estas aguas tienen sus características particulares, su propio 'label' local. Los especialistas la describen como «una ola larga, de unos 200 metros de recorrido, que aguanta mucho tamaño» antes de romper bajo una pared de 60 metros.

Estamos hablando del lado derecho de la bahía del Abra, frente al Puerto comercial de Bilbao.La 'cosecha' no fue mala. Se cogieron 77 olas, algunas de hasta 5 metros, según contabilizó el director de la prueba, Jokin Arroyo. El caso es que Fernández se llevó 1.700 de los 6.800 euros que repartió entre premiados y participantes la organización, que corrió a cargo de la Euskal Herriko Surf Federazioa y la revista 'Sesenta'. También fueron distinguidos en la prueba, en la que se dieron cita los mejores especialistas del Cantábrico, Pablo Solar, de Torrelavega, y Pablo García e Íñigo Idigoras, ambos de Zarautz.

Solar se llevó el Premio al Mejor Surfista de la Sesión (1.200 euros); García, el Premio a la Bajada de Ola Más Crítica (600); e Idigoras, el 'Wipe Out' (al mayor tortazo; 300).Uno de los momentos más espectaculares y críticos de la sesión fue cuando el barco de la organización, para facilitar el trabajo a los reporteros gráficos, se acercó demasiado al escenario de la competición y estuvo a punto de cogerle una ola. Se quedó encima de ella y la bajada fue tan espectacular como peligrosa.